¿Qué oculta el empeño de las élites por promocionar a todas horas el veganismo y los alimentos de laboratorio? ¿Qué pretenden los manipuladores que pueblan los medios de desinformación y otras instancias al acusar como una de las causas del timo cambio climático a la crianza de ganado y al consumo de carne?
El aleccionamiento de las masas sobre este asunto llega a límites verdaderamente absurdos. Hasta el punto de que no pocos votantes de izquierda radical que han apoyado repetidamente en las urnas a partidos de ultra izquierda liderados por anormales y delincuentes, ven como algo normal que sus líderes estén instalado en el degenerado discurso de la agenda 2030 de las energías verdes, la agenda LGBT, lo eco sostenible y la guerra contra el consumo de carne mientras se hacen fotos en las barbacoas de sus casas asando filetes, morcillas y chorizos u ofrecen chuletón de Ávila en los menús de sus celebraciones.
El trasfondo es mucho más profundo que la incoherencia de estos personajes y la inconsistencia de sus mensajes. Todo lo que ayude a conseguir el objetico de despoblación y sustitución poblacional que las élites tienen planeado para el mundo en general y la civilización occidental en particular es susceptible de ser potenciado para conseguir el objetivo final. Y la imposición de una dieta de alimentación humana que «cuide del planeta» favorece en gran manera a ese gran plan en el que la ONU, la OMS, el FEM y otros muchos organismos nacionales e internacionales trabajan arduamente. Y si para ello hay que llenar de mitos y falsedades la información sobre nutrición y alimentación saludables, las élites y sus medios de manipulación y desinformación no tienen ningún reparo en hacerlo.
El mensaje de este vídeo se basa en la historia. Nuevamente, el dato mata al relato y la intención oculta queda al descubierto.